Como en otras ocasiones, no nos hemos resistido a tener en la estantería nuestro querido jabón de arcilla, pero en esta ocasión es más especial aun si cabe. Está realizado con tres arcillas, blanca, roja y verde. Nos faltaba por conseguir la arcilla blanca, llamada caolín, muy empleada en cosmética.
En primer lugar, dejaros el artículo del
jabón de arcilla verde que hicimos hace ya un tiempo, en el que podéis leer algunos de los beneficios y propiedades de esta arcilla. Y ya que las arcillas se han utilizado desde tiempos remotos para la cosmética y la medicina, recordaros
que está indicado para todo tipo de pieles, aunque es muy aconsejable para pieles
grasas, mixtas y con tendencia al acné (limpia los poros, desengrasa y oxigena
la piel). Y si queremos aumentar la eficacia del producto debemos aplicarlo
directamente sobre la piel y esperar unos minutos antes de retirarlo con agua.
Para seguir con nuestro tres arcillas, por qué no, con la arcilla roja que debe su color a su alto contenido en hidróxidos de hierro y óxidos, esto le otorga a la arcilla propiedades astringentes. Esta arcilla tiene propiedades similares a la de la arcilla verde, pero reseca menos la piel. Se utiliza para tratamiento del acné y también es utilizada como tratamiento casero para quitar las espinillas y puntos negros. Tiene también propiedades antiinflamatorias para las articulaciones y antisépticas, por su origen natural.
Para terminar, la arcilla blanca, también conocida como caolín, entre sus principales compuestos está el aluminio y el silicio. Aporta a la piel suavidad y firmeza ya que absorbe las células muertas y elimina las toxinas,
tiene un gran poder astringente, y destaca por su acción antiinflamatoria, desintoxicante, antibacteriana y cicatrizante.
Como habéis leído es un jabón increible, y las bondades de cada una de las arcillas lo dicen todo, no hay más que decir, ¿quién quiere probarlo?